Las lecitinas se obtienen de las semillas de la soja, que es una planta originaria del oriente. Estas semillas son muy ricas en ácidos grasos poliinsaturados, proteínas, fósforo y lecitina. La lecitina es un componente muy importante para nuestro organismo ya que se encuentra en grandes cantidades en el cerebro, hígado, riñones y médula ósea.
La principal función de la lecitina de soja es reducir el exceso de colesterol, disolviendo las grasas y facilitando su digestión y absorción intestinal. Recomendable en dietas de adelgazamiento.
Interviene en la formación de los glóbulos rojos. En régimen de adelgazamiento moviliza los depósitos de grasas que hay debajo de los tejidos.
Protege el hígado, facilita la circulación sanguínea, previene contra la arterioesclerosis, equilibra el sistema nervioso, reduce la hipertensión… Por su contenido en Vitamina E, mejora la calidad de la piel. Favorece las digestiones, sobre todo de las grasas; ayuda a los diabéticos a absorber y metabolizar los azúcares y almidones. Es uno de los alimentos más alcalinizantes que existen.
Suministra fósforo orgánico al organismo por lo que se utiliza para mejorar el trabajo intelectual y los casos de falta de memoria. Muy recomendada para estudiantes y personas de edad avanzada.
Ejerce una acción rejuvenecedora de las células del organismo, y en especial del cerebro y la médula espinal.